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Babymoon: consejos y destinos para una Luna de Miel embarazada

Hoy tenemos el placer de contar con una autora invitada muy especial, María José Muñoz, fundadora de Los viajes de Pepa. Esta apasionada del turismo y de descubrir nuevos rincones lleva más de 4 años deleitándonos con sus aventuras y poniendo el foco sobre una forma de viajar acerca de la que no se habla demasiado: viajar con bebés y niños pequeños.

¡Te dejamos volar libre, María José!

El concepto de “babymoon” ha ido evolucionando hasta convertirse en una tendencia popular entre las parejas que esperan un hijo, buscando disfrutar de un último viaje juntos antes de embarcarse en la aventura de la paternidad. Pero, ¿de dónde surge exactamente este término tan especial?

La respuesta nos lleva de vuelta al año 1996, de la mano de Sheila Kitzinger, una renombrada antropóloga social británica. Kitzinger, en su libro “The Year After Childbirth”, introdujo por primera vez el término “babymoon”, destacando la importancia de este periodo para facilitar la transición a la paternidad. Según ella, este tiempo resulta más ameno y llevadero cuando el futuro padre puede tomar un descanso para estar con su pareja y el recién nacido, una fase que ella bautizó como “babymoon”(luna de bebés).

La llegada de un bebé es un momento emocionante y transformador en la vida de una pareja, y qué mejor manera de celebrarlo que con un viaje. En este artículo,encontrarás una guía sobre cuándo es el mejor momento para realizar tu viaje de babymoon durante el embarazo, las razones para optar por una babymoon y, por supuesto, las mejores ideas de escapadas para celebrar tu luna de miel embarazada.

¿Cuándo hacer tu viaje de babymoon?

Planificar un viaje de babymoon puede ser una de las experiencias más emocionantes para las parejas que esperan un bebé. Sin embargo, es crucial elegir el momento adecuado para viajar durante el embarazo para asegurar tanto la comodidad de la madre como la seguridad del bebé. Según las recomendaciones médicas y las políticas de las aerolíneas, hay un período óptimo para embarcarse en este tipo de viajes.

El mejor momento para viajar durante el embarazo es durante el segundo trimestre. En esta etapa, las molestias comunes del primer trimestre, como las náuseas matutinas, suelen disminuir, y el riesgo de aborto involuntario o de parto prematuro son menores durante el
segundo trimestre. Aunque es posible volar desde el primer trimestre, es esencial consultar a tu médico antes de planificar cualquier viaje, ya que puede proporcionarte orientación personalizada basada en tu salud y la de tu bebé.

La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) aconseja evitar los viajes aéreos durante el último mes de embarazo y hasta siete días después del parto. Para las futuras madres que viajan a partir de la semana 36 de gestación, o desde la semana 32 en caso de un embarazo múltiple y sin complicaciones, es necesario presentar un certificado médico que autorice el vuelo.

Además, es altamente recomendable contratar un seguro de viaje que cubra específicamente el embarazo. Este seguro debe incluir asistencia sanitaria y un seguro de cancelación de viaje para ofrecer tranquilidad frente a cualquier imprevisto que pueda surgir. Viajar embarazada requiere una planificación cuidadosa y considerar todos los aspectos de seguridad y bienestar para garantizar una experiencia placentera y sin estrés.

Recomendaciones para embarazadas

Aquí tienes algunos consejos prácticos que te ayudarán en tu viaje en avión:

Aprovecha las prioridades en el embarque que se ofrecen a las embarazadas, usa ropa holgada y opta por un asiento en el pasillo para facilitar el movimiento durante el vuelo (camina a lo largo del pasillo con cierta frecuencia, flexiona las piernas cada treinta minutos, rota tobillos y mueve los dedos de los pies). Estas medidas no solo ayudan a acomodarte mejor en el avión, sino que también contribuyen a que mantengas una circulación adecuada, crucial para prevenir complicaciones como la formación de trombos.

Por otro lado, es importante que moderes la ingesta de alimentos antes de volar, eligiendo comidas ligeras que no causen malestar o reflujos y recuerda mantenerte hidratada bebiendo agua con regularidad.

Además, la seguridad tuya y la de tu bebé siempre es lo primero. Por lo tanto, evita viajar a zonas donde hay malaria y fiebre amarilla (fiebre amarilla – Centro de América del Sur y partes de África ecuatorial). Debido a que el Zika (virus que se transmite a través de la picadura de un mosquito infectado con el virus) durante el embarazo puede causar defectos de nacimiento graves, si estás embarazada, no debes viajar a zonas que, en este momento, están afectadas por el brote del Zika.

¿Por qué hacer un viaje de babymoon?

Una babymoon no solo brinda la oportunidad de disfrutar de tiempo de calidad en pareja antes de que las noches sin dormir y los pañales se apoderen de tu rutina, sino que también permite a la futura mamá relajarse y desestresarse, algo esencial para la salud tanto de la madre como del bebé y además permite:

  1. Fortalecer la conexión de pareja: Un babymoon es una oportunidad para que los futuros padres se centren en su relación, fortaleciendo su vínculo antes de la llegada del bebé.
  2. Nutrición emocional y relajación: Ofrece un espacio para que tanto la madre como el padre por nacer se relajen y se nutran emocionalmente, alejados de las rutinas diarias y responsabilidades.
  3. Celebrar la relación: Es una forma de recordar y celebrar lo que unió a la pareja, disfrutando de actividades románticas y de ocio juntos.
  4. Explorar destinos únicos: La posibilidad de viajar a lugares que podrían no ser tan accesibles o prácticos con un bebé, aprovechando para sumergirse en nuevas culturas y experiencias.
  5. Crear recuerdos preciosos: Estos viajes permiten a la pareja crear recuerdos duraderos que podrán compartir con su hijo en el futuro, añadiendo una capa de significado personal a su aventura.
  6. Preparación para la paternidad: Además de ser una celebración, un babymoon también sirve como un momento de reflexión y preparación emocional para los cambios que trae la paternidad.
  7. Aprovechar la libertad: Disfrutar de la libertad de viajar sin las limitaciones y necesidades de un bebé, desde elegir destinos remotos hasta participar en actividades que son más desafiantes con niños.

Un babymoon no es solo un viaje; es una inversión en la relación de pareja y en la familia que está por crecer, brindando una base sólida de amor y compañerismo.

Las mejores escapadas para celebrar tu luna de miel embarazada

Ya sea que prefieras una escapada corta o una aventura más extensa, hay opciones maravillosas tanto dentro de Europa como en destinos más lejanos que prometen hacer de tu luna de miel  una experiencia inolvidable.

Escapadas cortas para tu luna de miel embarazada

Italia: La bella Italia, con su combinación de cultura, historia y gastronomía, es el destino perfecto para parejas que buscan romance. Desde las góndolas de Venecia hasta las colinas de la Toscana, cada rincón ofrece una experiencia mágica y relajante ideal para futuros padres.

Santorini, Grecia: Santorini es sinónimo de puestas de sol espectaculares, casas blancas con cúpulas azules y vistas al mar Egeo. Su ambiente tranquilo y sus playas serenas son perfectas para parejas en busca de un refugio romántico.

Islandia: Para las parejas aventureras, Islandia ofrece paisajes impresionantes, desde géiseres y cascadas hasta las relajantes aguas termales de la Laguna Azul. Es el lugar ideal para reconectar con la naturaleza y vivir experiencias únicas.

Escapadas más largas para tu Babymoon

Costa Rica, América: Con su rica biodiversidad, playas vírgenes y reservas naturales, Costa Rica es el destino perfecto para parejas que buscan una aventura en la naturaleza sin renunciar al confort y el relax, todo en un entorno seguro y acogedor.

Maldivas, Asia: Si lo que buscas es el epítome del lujo y la exclusividad, las Maldivas son el destino ideal. Bungalows sobre el agua, aguas cristalinas y un servicio excepcional hacen de este lugar un paraíso para parejas en su babymoon.

Independientemente del destino seleccionado, es primordial valorar cada instante, consolidar la relación y prepararse conjuntamente para el emocionante capítulo que está por iniciar.

 ¡Feliz babymoon!